En toda América Latina hay miles de jóvenes que estudian Comunicaciones o carreras afines, como Ciencias de la Información, Relaciones Públicas, Periodismo y otras tantas con nombres parecidos. De todos ellos, muchos quedarán en el camino y terminarán trabajando en otras actividades. Pero habrá otros que sí tendrán sus oportunidades, y de su capacidad para aprovecharlas dependerá sus carreras. Porque en la Universidad habrán aprendido muchas cosas, pero faltará algo esencial que nadie se encarga de enseñarles: Cómo hacer una carrera profesional en comunicaciones.
Para el momento en que termina sus estudios es necesario que el joven profesional cuente con un CV bien preparado, que refleje sus conocimientos y habilidades, e incluso sus experiencias. El manejo de idiomas es imprescindible: inglés en primer lugar, pero también los dos idiomas de la región para poder desempeñarse en todo el territorio. Los brasileros deberían estudiar español, y el resto portugués. Otro requerimiento creciente es el dominio de la tecnología, y ya no alcanza con manejar los programas esenciales de productividad laboral como MS Office, sino también redes sociales y varias aplicaciones móviles.
Un antecedente valioso para el CV un joven profesional es su experiencia, por más corta que sea. Por ejemplo, mencionen los trabajos realizados en la universidad que evidencien su desempeño en áreas que puedan resultarle valiosas a las organizaciones. Sin embargo, un estudiante debería tomarse seriamente la posibilidad de realizar una pasantía en alguna empresa, y no sólo por las relaciones que establezca y la experiencia que gane, sino también por el antecedente que sume a su trayectoria. En el momento de elegir, una empresa optará la experiencia.
Pero más allá de las materias estudiadas y de los exámenes aprobados, una vez que se consigue un trabajo, sus conocimientos, habilidades y actitudes serán puestos a prueba constantemente. Algunas de las cualidades requeridas más frecuentemente en sus carreras son: la comunicación oral y escrita; la capacidad de relacionamiento, incluyendo la empatía; las habilidades persuasivas; la destreza en el análisis y procesamiento de la información; el conocimiento de la realidad política, económica y social del país; la disposición al trabajo en equipo; las capacidades de organización y coordinación; el sentido común; y la paciencia.
A lo largo de más de 30 años de carrera, he trabajado en periodismo, organizaciones sin fines de lucro, comunicaciones corporativas, comunicaciones externas tanto para consumo masivo como para el segmento de negocios, comunicaciones internas, redes sociales, generación de contenido y otras tantas áreas. Algo que aprendí hace muchos años es que uno sabe donde empieza su carrera, pero no donde termina. Las carreras son cambiantes, exigentes, e incluso difíciles. Exigen cualidades que difícilmente encontremos en una descripción habitual en una búsqueda de trabajo, pero que permanentemente serán necesarias para continuar creciendo.
Esas cualidades usualmente no están en los manuales y generalmente se aprenden con los años. Tal vez mi experiencia y mis conclusiones ayuden a acortar el camino. Por ejemplo:
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Amen lo que hacen: Como dijo Steve Jobs: “Si por la mañana piensan que lo que harán en el día no los hace felices, es que hay algo que deben cambiar”. Tienen que amar lo suficiente su profesión como para estar 12 horas seguidas trabajando y no sufrir por ello. Si no lo sienten, cambien a tiempo de carrera. Si persisten van a convertirse en individuos quejosos y frustrados por pasar la mayor parte de su día haciendo lo que no les gusta.
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Continúen aprendiendo: la formación profesional se termina, y sólo si uno quiere, en el momento de la jubilación. Las profesiones evolucionan todo el tiempo y uno no puede quedarse atrás. Cursos, maestrías, doctorados… todo es bueno para seguir creciendo.
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Sean fuertes: La fortaleza es necesaria para sostenerse en los momentos difíciles y superar las dificultades. Las carreras no son fáciles, y muchas veces hay que enfrentarse a momentos de frustración. Eso requerirá de toda su fortaleza interna.
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Quéjense poco, y aporten muchas soluciones: Nadie quiere trabajar con personas quejosas que reclaman todo el tiempo, sino con quienes aportan soluciones. Sean Positivos y Proactivos. Si identifican un problema, propongan una solución. Eso les va a generar nuevas oportunidades en sus carreras.
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Armen su Red de contactos: Relaciónense, conversen con otras personas y aprendan de sus experiencias. Por más bien que pueda irles en algún momento, van a tener que interactuar con otras personas, dentro y fuera de la organización. De esas relaciones y de los conocimientos que aprendan dependerá su estancamiento o progreso profesional.
- Sean flexibles: El mundo cambia, las organizaciones cambian, y ustedes deben estar dispuestos a cambiar. Hoy pueden estar cómodos en su zona de confort, pero algún día se les puede requerir que se adapten, realicen otro trabajo o se integren a algún equipo. La Flexibilidad es uno de los atributos más importantes en las empresas actuales.
- Hagan historia: Cada vez más, lo que ustedes hacen se convierte en una historia que puede ser seguida, comentada y juzgada. Todo se sabe. Sea en las redes sociales o por los comentarios de sus colegas y compañeros de trabajo. Si tienen logros, se hablará de ello. Si cometen errores, se hablará más aún. Sean consientes que cada paso que den dejará una huella en su trayectoria profesional.